Diferentes productos del bar Las Bridas 1972.
El bar favorito de Teresa Urquijo y su familia está en este bonito barrio de Madrid: famoso por el chuletón, el pulpo y el solomillo
Esta taberna castiza y muy típica de la capital destaca por combinar la cocina tradicional con toques innovadores que han consolidado su éxito.
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Madrid es la ciudad de las mil oportunidades de ocio. Saliendo por sus calles descubriremos el verdadero placer de pararnos en un bar a tomar algo o de sentarnos en una terraza a disfrutar de una cerveza. Y es que lo difícil en una ciudad que nos ofrece un abanico tan amplio de posibilidades es elegir, ya que las opciones no se acaban y todos queremos acertar a la primera.
Además, la capital tiene la virtud de igualarnos a todos, seamos ciudadanos anónimos o grandes rostros conocidos en todo el mundo por ser estrellas de la música, del deporte, del cine o incluso de la política. Por ello, Madrid nos abre las puertas para que podamos disfrutar de sus calles y de su vida tomando ese vino que nos reconforta y esa tapa que nos llena el estómago y el alma.
Y es que Madrid tiene la ventaja de que nos ofrece siempre lo que necesitamos. Ese bar de precios baratos y generoso en sus raciones o ese restaurante con el mejor producto y el servicio más exclusivo para sentirnos reyes al menos por un día. En la variedad está el gusto y es que sólo teniendo tanto donde elegir podremos probar de manera variada un poquito de todo.
Como decíamos, de estas ventajas pueden disfrutar personas acostumbradas a vivir en el anonimato o bajo el calor de los focos. Y uno de los casos más relevantes es el de Teresa Urquijo, la esposa de José Luis Martínez-Almeida, alcalde de la capital. Ella, acostumbrada a vivir hasta ahora sin una cámara detrás a pesar de proceder de una familia de alta alcurnia, tiene que lidiar con ser noticia a cada paso que da. Una situación que persigue también a su familia.
Sin embargo, entre todos llevan como pueden ser la novedad. Ahora, inmersa en el embarazo de su primer hijo, ha disfrutado de la Semana Santa, primero en Málaga y después en Madrid, donde se encuentra estrenando barrio. Y es que durante estos días ha podido incluso disfrutar de alguno de sus rincones favoritos de la capital como es el bar Las Bridas 1972, una taberna castiza madrileña donde se ofrece una carta variada y de excelente calidad.
¿Cómo es el bar preferido de Teresa Urquijo?
Los Martínez-Almeida y Urquijo han disfrutado de una Semana Santa muy particular, marcada por los momentos de relax y el esplendor religioso. Después de pasar por Málaga por procesiones como la del Cristo de la Buena Muerte, regresaron a Madrid donde también disfrutaron de la salida del Cristo de los Alabarderos.
Estas fechas tan especiales, la última Semana Santa antes de la llegada de su primer retoño, les han servido también para afianzarse en su nuevo ecosistema, el castizo barrio de Zurbano, a donde se han mudado para tener un núcleo cercano aún más consolidado. Almeida se sentirá como en casa, ya que esta zona de Chamberí queda muy cerca de la sede del PP en la calle Génova.
Y por parte de Teresa de Urquijo, tiene allí a varios de sus familiares más cercanos. De hecho, sus padres viven a tan solo 50 metros de su nueva casa. A pesar de que llevan poco tiempo, la pareja se siente como si llevaran toda la vida en su nuevo enclave, una zona señorial marcada por su arquitectura clásica y por su agitada vida social, esa de la que ya han podido disfrutar.
Tanto es así que Almeida y Teresa de Urquijo ya tienen algunos sitios predilectos como el que es uno de sus bares preferidos, una taberna puramente madrileña que se convierte en uno de los restaurantes más sofisticados. Se trata de Las Bridas 1972, un habitual de la alta sociedad de la capital que dirigen Luis Torremocha y Marta Martínez-Bordiú.
Este restaurante destaca por ser la combinación perfecta entre tradición e innovación. Por ello podemos disfrutar de clásicos de la cocina española como unas exquisitas lentejas o de opciones menos vistas como su delicioso brioche de steak tartar. Otras opciones destacadas de su impresionante carta son el pulpo a la parrilla, los dados de solomillo salteados o sus ostras.
Pero Las Bridas 1972 no solo brilla gracias a sus platos más elaborados, ya que también puede convertirse en tu taberna de confianza gracias a sus exquisitas tapas y raciones. Las preferidas de Almeida son sus gildas, otro de los clásicos madrileños. Una experiencia gastronómica a precios razonables difícilmente igualable en la capital.
