
El senador de ERC Joan Queralt, este jueves durante la comparecencia de María Jesús Montero en la Cámara Alta. Senado
Junts y ERC exigen ya el 'cupo catalán' y amenazan con usar "la bala de plata" de sus votos porque "la paciencia se agota"
María Jesús Montero ve inviable pactar la financiación autonómica con las CCAA y pide a Feijóo que asuma la negociación.
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Junts y ERC han exigido este jueves en el Senado a la vicepresidenta María Jesús Montero que cierre ya el acuerdo para otorgar a Cataluña un sistema de financiación similar al concierto vasco.
Especialmente combativo se ha mostrado el senador de ERC Joan Queralt, quien ha recordado que el pacto que firmó su partido para la investidura de Pedro Sánchez alude a la "soberanía fiscal compartida", para que la Generalitat pueda recaudar todos los impuestos.
Sin embargo, se ha quejado, "se está negociando muy lentamente, sólo tenemos buenas palabras y encima tenemos que pagar el café de las reuniones".
"La paciencia, como la arena de lo relojes, puede agotarse", ha advertido, "de perdidos al río. No tiren demasiado de la goma, porque la elasticidad al final tiene un límite". Y ha insistido: "La paciencia tiene un límite".
En su réplica, la vicepresidenta María Jesús Montero ha recalcado que Pedro Sánchez "ha llegado a acuerdos de investidura que vamos a cumplir" y ha explicado que su departamento está trabajando con la Agencia Tributaria para diseñar el nuevo modelo de financiación de Cataluña.
"Uno de los primeros retos es el IRPF, como algunos impuestos que no cobraba la Generalitat", ha señalado. Pero ha advertido a ambos partidos independentistas de que no se trata de un debate "que podamos resolver de la noche a la mañana".
María Jesús Montero ha recordado que la Constitución reserva el modelo del concierto económico para el País Vasco y Navarra, cuyas haciendas forales tienen la capacidad de recaudar todos los tributos que se pagan en su territorio.
Pero, ha añadido, la fórmula pactada con ERC es "una aproximación hacia ese modelo", que incluirá además una cláusula de solidaridad que permita "homologar la prestación de servicios públicos en todo el Estado, sin que no hayas diferencias, vivan donde vivan los ciudadanos".
Los senadores de ERC y Junts no se han mostrado muy de acuerdo con este concepto de solidaridad. "Los pactos políticos son sagrados", ha dicho Joan Queralt, "y se defienden con los votos, que es la bala de plata".
"O ustedes se dejan de zarandajas o nos vamos a una eternización", ha añadido el senador de ERC, quien ha pedido cerrar el acuerdo "bastante antes del final orgánico de la legislatura".
Pero, además, ha exigido que la ley que regulará el cupo catalán incluya el principio de "ordinalidad", según el cual Cataluña no puede quedar rezagada tras otras CCAA, tras realizar su aportación a la "solidaridad".
"Esa solidaridad tiene que ser limitada por la ordinalidad", ha dicho al respecto, porque "no puede ser que después de ir a la caja, yo tenga menos dinero".
"Recaude quien recaude, la ordinalidad es el decimoprimer mandamiento de la ley de Dios, que para nosotros es el primero", ha dicho gráficamente.
El actual sistema de financiación autonómica, ha indicado el senador de ERC, "es obsoleto, es hijo del centralismo, que con forceps intentan pasar casi por federalismo".
Y ha rematado, sobre la negociación del cupo catalán: "No vamos por buen camino, el sistema es obsoleto, está gripado. La paciencia tiene un límite".
La senadora de Junts Teresa Pallarès ha usado términos más drásticos. Ha asegurado que, pese a encontrarla insuficiente, su partido apoyará la quita de la deuda de 17.000 millones de la Generalitat (el 20% de su deuda) porque "la Administración catalana necesita liberarse de esta dependencia económica del Estado".
Esto permitirá a la Generalitat ahorrarse 300 millones de euros en el pago de intereses, según ha destacado.
Pero ha insistido en que la Cataluña arrastra un "déficit fiscal de 22.000 millones de euros anuales", que es cerca del 50% del Presupuesto de la Generalitat, o el 10% del PIB de Cataluña, según ha estimado.
"Es un ataque directo al bienestar de los catalanes", ha protestado, "Cataluña merece y necesita ya, de forma urgente, un concierto económico. Es la única forma de frenar esta fuga de recursos".
Por otro lado, la ministra María Jesús Montero ha asumido que va a ser inviable pactar la nueva financiación autonómica con el conjunto de las comunidades autónomas, ya que cada una plantea su reivindicación de "máximos" y quiere hacer valer su "singularidad".
Por ello, ha pedido que esta reforma se aborde directamente en una negociación entre el PSOE y el PP.
A petición del PNV, Montero se ha comprometido a que ni el País Vasco ni Cataluña tendrán que sufragar, a través de sus haciendas forales, la condonación de más de 83.000 millones de euros de deuda de las comunidades autónomas de régimen común.
A preguntas del PP, Montero ha aludido también a la polémica que protagonizó el pasado fin de semana, al tachar de "vergüenza" la sentencia del TSJC que ha absuelto al futbolista Dani Alves del delito de agresión sexual.
"Seguiré defendiendo la credibilidad del testimonio de las mujeres", ha anunciado la vicepresidenta del Gobierno. "Aclaré dos veces lo que quería decir, si lo dije incorrectamente", ha añadido, "hasta pedí disculpas, y ustedes no lo hacen nunca, si alguien ha podido pensar que yo cuestionaba en abstracto la presunción de inocencia".
"Qué va", ha aclarado, "hablaba de lo que hablaba, hablaba de esa sentencia".